"Donde hay poca justicia es grave tener razón”
Francisco de Quevedo.
¡Cuánta
enjundia en tan cortas palabras! Se
podría transmutar por la expresión “donde hay poco interés por la justicia”. “Yo
soy la Ley”, parecen aseverar, en lenguaje gestual, e implícito ( “currículo
oculto”, que diría un pedagogo) los enemigos de la libertad, mientras se jactan
de su sensibilidad para los desfavorecidos, a los que desean la persistencia,
por mucho tiempo, en esa condición. Por
eso, cuando la equidad no impera, defender ciertos principios, o criticar otros, es como predicar en el
desierto, porque, entonces, los hechos no sirven como
evidencia ni impugnación de nada. Don
Francisco dixit.
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