Vistas de página en total

28 enero 2017

PSEUDOCIENCIAS.

     El asunto de las denominadas pseudociencias se enmaraña en los últimos tiempos desde la perspectiva de cualquier pensador neutral.  Ya no está claro si lo son sólo las descritas canonicamente como tales (Ufología, Astrología y demás) o si, por el contrario, podemos buscar asimismo en otros campos de consumo diario,  como la dietética o la ecología.  Si entendemos por pseudociencia aquella actividad o campo de estudio que se presenta como científico siéndolo sólo en apariencia, por no presentar más pruebas que testimonios orales, afirmaciones no falsables en principio o fárragos metafísicos,  el concepto es extensible a una parte considerable de lo que se vende como acreditado.  Los defensores del pensamiento crítico y racional se centran hasta ahora en las pseudociencias tradicionales, sin atreverse tal vez a entrar en otros campos en los que no sería políticamente incidir sin riesgo manifiesto de sufrir daños. .Pero basta únicamente con cavilar unos minutos y aplicar a esas otras "disciplinas" o "teorías" las mismas dudas e iconoclastia que se dedican a las otras.  No voy a dar ejemplos.  Que cada cual busque los suyos. 

21 enero 2017

TRUMP.

Hoy, dada la fecha, se me ha ocurrido escribir sobre la investidura de Trump, pero no sé qué decir, pues me siento contaminado intelectualmente por todo lo leído, y escuchado, acerca del nuevo presidente norteamericano.  En Europa tenemos un visión de ese país muy influida por la fascinación, tanto en lo negativo como en lo positivo.  Siempre me he encontrado con ciudadanos o ciudadanas de esta parte del Atlántico que consideraban a USA como un modelo de funcionamiento, como una arcadia política y económica llevada a la realidad; y otros, en su izquierdismo o progresía, veían a la gran metrópoli de Occidente como la fuente de todos los males, imputándole, muchas veces, en una suerte de paranoia conspirativa, la perfección en sus designios para sojuzgar al orbe.  Pero, fascinaciones de distinto signo aparte,  la coronación de Trump parece mostrarnos que la democracia americana también es humana,  que un discurso entre demagógico, antisistema y de gran simpleza puede llevarse el gato al agua desde el punto de vista del sufragio.  De hecho, los discursos simples suelen tener éxito.  Por eso el mundo es como es.  Esperemos que, una vez en el poder, el discurso se matice un poco y se vaya haciendo algo más complejo. O las cosas se podrán complicadas.

15 enero 2017

VIAJES

“Las personas viajan a destinos distantes para observar, fascinadas, el tipo de gente que ignoran cuando están en casa”. – Dagobert D. Runes


      El orbe se ha vuelto más pequeño y los traslados por el mismo son cada vez más fugaces.  El viaje se va mudando en desplazamiento.  Se va mucho a espacios lejanos, o no, para obtener la foto que levanta acta de la presencia del viajero y subirla a las redes sociales.  ¿Hace falta ir lejos para viajar? ¿Sigue existiendo la diferencia entre viajero y turista o ya todo es turismo en variantes diversas?  La diferencia es tal vez una cuestión de mentalidad y actitud.  Se puede viajar a sitios cercanos, incluso al lado de la propia casa.  Y hoy se viaja poco.  Eso sí, se va a muchos sitios, más o menos próximos, más o menos alejados, pero se hace, en general, con la actitud de coleccionar instantáneas o relatos, hoteles o restaurantes, supuestas observaciones de otras culturas en laboratorios creados ad hoc para el consumo turístico. Yo, entre todos los viajes, el que prefiero es el de esa carretera secundaria, no muy distante de casa, que nos lleva a parajes en los que no habíamos estado y de los que, en muchos casos, podríamos regresar andando.

08 enero 2017

ANACRONISMOS

El anacronismo es a la Historiografía lo que la metafísica a la Astronomía.  O era.  En las facultades de Historia se insistía bastante en evitarlo.  No parece que el mantra haya tenido mucho éxito; hoy se analiza el pasado con los valores del presente, tal vez porque muchos estudios tienen más de ideología que de ciencia histórica y parecen orientados a reescribir lo pretérito con un ojo puesto en las quimeras del futuro.  Al fin y al cabo, lo que denominamos Historiografía nació en parte como propaganda o exaltación del Poder; el relato de lo pasado puede justificar el presente para construir un futuro ligado al mismo.   En la era de Stalin, en la URSS, se llegó a borrar de las fotos a quienes, caídos en la desgracia de la heterodoxia y el desviacionismo,  eran tratados como si nunca hubieran existido.  O sea, que el asunto es viejo.  Desconfiemos, pues, del acercamiento a lo pasado con los valores o la moralina del presente, pues su intención es siempre liberticida.