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21 mayo 2018

DEJÀ VU.


Con el aumento de la edad, asume uno la impresión de que las cosas del mundo no van por buen camino.  Se trata de un vago "dejà vu",  cada vez más persistente a pesar de su carácter impreciso.  Repaso a Hanna Arendt (ya saben: la banalidad del Mal) y la duda permanece.  Los viejos fantasmas del pasado siglo, que parecían relegados, renacen con ropajes diferentes.  Está, por un lado, lo que podríamos denominar encasillamiento  del individuo, del ser individual subsumido de nuevo en categorías colectivas, como cultura o género, una vez desacreditado el universal de la raza.  Otra vez realismo versus nominalismo.  Por otro lado, se va imponiendo la sensación de que nadie puede salirse de los límites de la moral dominante, aplicados a través de lo políticamente correcto.  Y, al fondo de todo ello, minorías que creen conocer donde reside el Bien e intentan inocularlo al resto, de manera obligatoria y sin pararse en barras.  Sí.  Dejà vu. Eso es lo que uno siente.

18 mayo 2018

DISCUSIONES.


La argumentación no es arte para estos días.  Claro que hay debates, y disputas más o menos pautadas,  pero siempre sumidos en la neblina de lo emocional y de lo subjetivo. Para debatir, para argumentar en favor de algo, es forzoso, antes, ponerse de acuerdo sobre cada concepto, sobre cada término a utilizar en la pugna. No es plausible que un mismo concepto sea usado con acepciones encontradas, a veces, incluso, por parte del mismo sujeto en momentos distintos de su argumentación; ello supone cambiar las reglas del juego sobre la marcha o aplicar unas diferentes según la conveniencia de los jugadores.  ¿ Sería aceptable en un juego de mesa o de naipes?  Pues parece serlo en las querellas de hoy, marcadas por la confusión y el anacoluto.

08 mayo 2018

MEMORIA.


Somos lo que recordamos y también, asimismo, lo que otros observan en nosotros subsistiendo en su memoria.  Nuestros recuerdos mueren con nosotros,  como muere un trocito, mayor o menor, de aquellos que pasaron, en algún momento, por nuestras vidas.  Y fenece una parte de nosotros cuando abandona este mundo alguien que nos conoció en algún momento.  Eso es la memoria: un banco de datos individual, e intransferible, pasado por el tamiz de las emociones y los prejuicios.  No existe, creo yo, la memoria colectiva ni nada que se le asemeje; no confundamos la memoria con los anales o con la labor de los historiadores.  Tampoco existe, por tanto, la memoria histórica.  Está, por un lado, la Historiografía, como reconstrucción y análisis más o menos parcial, y, por otro, las series de datos.  Pero memoria, no; la misma es personal e indivisa, como fruto de sinapsis, procesos cerebrales y descargas emocionales en el interior de cada sujeto.  No pretendamos mezclar el recuerdo de lo vivido que, aunque respetable, es siempre incompleto y subjetivo, con ninguna suerte de categorización a la que se añada el adjetivo "histórico".

04 mayo 2018

NATURALEZA


Cuando regresa de un día de ruta por espacios naturales, bosques o caminos forestales, siente el homo urbano el relax que le genera el extrañamiento de su orbe artificial y humanizado.  Somos seres de lejanías (creo que ya lo afirmó Heidegger) y nos placen los universos distintos y distantes.  Tal vez por ello elaboramos un concepto de Naturaleza, con mayúscula, como entidad sustantiva y metafísica.  De ahí al conservacionismo extremo de todo lo "natural", hay un paso; se trata, en el fondo, de conservar la obra de Dios, pues tal vez ello derive del panteísmo bajo-medieval y tomista, un nutriente esencial, y originario, del ecologismo, entendido como religión de nuestros días.  En ese panteísmo, el ser humano parece no ser nada, una simple anécdota contingente en el devenir de los eones.  Y, claro, ¿quién es ese ser humano para influir en la Naturaleza  y decidir sobre ella?  Salvo que ese humano sea ecologista y partidario del conservacionismo, en cuyo caso sí puede erigirse en salvador del ecosistema.  De este modo, entramos en un fenómeno ya viejo: la división entre los poseedores de la verdad y el resto, o sea, el supremacismo en su vertiente ideológica.